sábado, 7 de enero de 2012

Mezquindad


                                                  Muéstrate, ya no te escondas. Exprésate, que tu voz desgarre oídos y deje en tu garganta ardores de mucho más. Revélate, corre esa cortina que sólo nos deja ver sospechas de vos. Que nadie está jugueteando a las conjeturas, que esto no es  zona de pronósticos, que los supuestos y deducciones  los aprovechen los detectives para sentir entreverte más. Lúcete, despójate de las miserias, deja a la luz tu interior. Enciéndete, brilla para tus vivos, regálales tu alegría, entrégales primavera en su helada seriedad. Y así, clara y luminosa, despliégate, abrázate, recoge tus barcas  y  escóndete sin piedad.

                                                                     Silvana
                                                                                07/01/2012

1 comentario:

Moisés Herrerías Diego dijo...

A veces el sol se esconde detrás de la luna, pero ni siquiera ella es capaz de contener su luz, así como ocurre con vos.